¿Has oido hablar de las Perseidas? ¿O de las Lágrimas de San
Lorenzo? ¿O bien de los trazos luminosos que dejan tras de sí los restos del
cometa Swift-Tuttle al abrasarse cuando cruzan la atmósfera terrestre?
Bueno, pues todo es lo mismo. Y durante las noches del 11 al
13 de agosto, puedes disfrutar de este espectáculo cósmico... ¡gratis! Solo hay
que seguir unas sencillas indicaciones.
- Busca un sitio indicado para observar. Evidentemente, puedes intentar la observación allí donde estés, pero las luces de las ciudades generan un halo luminoso que encubre muchos de los meteoros más débiles, empobreciendo el espectáculo perseido.
- Tiéndete en el suelo (una manta gruesa o una hamaca serán bien recibidas), acostumbra la vista a la oscuridad y mira hacia Perseo, origen aparente de los trazos luminosos. Usa la fácilmente reconocible constelación de Orión como referencia (incluimos mapa gentileza de la NASA)
- Aunque el fenómeno se prolonga toda la noche, el espectáculo mejora hacia la madrugada, cuando el punto de origen de los trazos está más alto en el cielo, afectándole menos la polución atmosférica y lumínica.
- Además, de madrugada puedes aprovechar la decorativa presencia de un fino “corte de melón” lunar y de los brillantes planetas Venus y Júpiter para montar una observación astronómica la mar de aparente.
- No olvides incluir algo de ropa de abrigo en tu excursión, que el relente mañanero es muy traicionero, incluso en agosto.
¿Vale la pena el madrugón? (o la ausencia de sueño). Bueno, en palabras de Bill Cooke, de
la Meteoroid
Environment Office de la NASA, "We expect to see meteor rates as high
as a hundred per hour. The Perseids always put on a good show"
(o sea, que se esperan lluvias de meteoroides de hasta ciento por hora,
y que el desconsolado San Lorenzo suele ofrecer un buen show con su ardiente
llanto. Efectivamente, mis traducciones suelen ser bastante creativas).
Ánimo, y ¡todo el mundo al suelo! (pero boca arriba, y
mirando a Perseo)
Xavier